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Un niño que no podía levantar(con traductor automático)
Después de que él asaltado hermanos, su familia decidió que no tenía más remedio que renunciar a la adopción de otro
Domingo, 13 de agosto 2000
Por Cindi Lash, Redactor del Servicio Post-Gazette
Los zapatos le consiguió.
La primera vez que Melissa vio una fotografía de el flaco, rubio ruso que sería su cuarto hijo, con los ojos a la baja de su desnatada en solemne, casi temerosa mirada y corte de cabello irregular.
Su mirada cayó a sus pies, metidos en zapatillas de lona sucia que claramente eran para una niña. Melissa supo más tarde que las zapatillas no eran ni siquiera la suya. Él y los otros niños en el orfanato donde había pasado la mayor parte de su vida cambió cuando su turno calzado llegó a jugar al aire libre.
"Se veía tan patética", dijo Melissa. "Tenía miedo de que moriría si lo dejamos allí. Quería salvarlo."
Después de días de oración ferviente, de conciencia y las súplicas de sus tres hijos biológicos, Melissa y su marido, Gerry, dio la bienvenida al niño de 3 años de edad a su casa en un suburbio occidental de Pennsylvania.
Desde entonces, su felices para siempre "esperanzas han erosionado y desapareció. En noviembre, después de que el chico había asaltado varias veces las mascotas, hermanos y otro niño en un evento comunitario, Melissa y Gerry hizo la dolorosa decisión de sacarlo de su casa y de romper sus lazos con él.
Melissa, 36, y Gerry, de 49 años, se encuentran entre un pequeño pero creciente número de padres que han optado por alterar - o disolver - adopciones porque no podían proporcionar la atención necesaria a sus hijos.Experiencias como la de ellos hizo que el gobierno de Rusia este año para suspender las adopciones internacionales mientras se revisa su sistema de adopción.
Melissa, quien pidió que su apellido y detalles acerca de su hijo adoptivo se le niegue, dijo ella contó la historia de su familia en un esfuerzo para impulsar las agencias de adopción para ser más responsable y futura con otras familias.Ella y Gerry pidió el anonimato para proteger la identidad del niño, que ahora vive en otra comunidad en el oeste de Pensilvania.
A diferencia de muchas parejas que consideran la adopción, Melissa y Gerry no tenía problemas de infertilidad que les impedía concebir otro hijo. Pero Melissa y compartir Gerry una fuerte fe cristiana, y se sentían obligados a compartir sus bendiciones con los menos afortunados.
Con herencia rusa de Gerry en mente, decidió en 1996 adoptar de Rusia. Un profesional de la educación universitaria de atención de salud, Melissa dijo que ella y Gerry sabía que los niños de los orfanatos de Rusia no había tenido el mejor comienzo en la vida y podían tener problemas de salud o emocional, pero que creían que podían hacer frente.
"No somos gente estúpida", dijo. "Hicimos la investigación, todas las entradas y salidas."
Eligieron una agencia de adopción a nivel local después de oír cosas positivas sobre él. Ella no va a nombre de la agencia, pero desde entonces ha salido de negocio.
Melissa dijo que ella y Gerry dijo a los trabajadores en la agencia que debido a que ya tenía tres hijos, que no querían adoptar a un niño con discapacidades graves, problemas de salud o el síndrome de alcoholismo fetal.
En enero de 1997, la agencia les envió una foto y la información médica acerca de una chica supuestamente sanos de 2 años de edad.
Justo antes de irse a Rusia a buscar a esa chica, la agencia les envió otra instantánea - el muchacho triste con zapatillas prestadas. ¿Podría Melissa y Gerry hacer espacio para otra, hijo mayor también?
Funcionarios de la agencia dijeron que había muy poca información sobre el niño, lo que indica que había leves retrasos en el desarrollo. Sin embargo, dijo Melissa funcionarios de la agencia aseguró que la pareja que "una vez que aprendió Inglés, que había disparan."
"Hemos rezado y orado por ella", dijo Melissa. "Teníamos miedo de tener cinco en la universidad al mismo tiempo. Entonces [uno de sus hijos] se ofreció a compartir su dormitorio. [Otro] hijo le preguntó si [el] muchacho encontraría otra familia que le encantaría que podíamos".
Así que Melissa y Gerry decidió abrir sus corazones y sus bolsillos se extienden para incluir al niño, así como la muchacha. Llegaron en un orfanato del niño 15 de junio 1997, y pasó un fin de semana visitando a él.
Sólo entonces, dijo, hizo que recibió una copia traducida de la historia clínica del niño. No contenía información alarmante que podría haber cambiado de opinión sobre la adopción de él la próxima semana.
Melissa y Gerry recuperan su nueva hija de otro orfanato. Casi de inmediato, que sospechaban que las cosas no estaban bien.
El muchacho fue notablemente hiperactivo. No permitiría que sus nuevos padres le toca.
Su nueva hermana fue muy lenta hasta que la familia abordó el avión a casa.Luego arqueó la espalda, se puso rígida y lanzó un grito para los próximos 14 horas.
En casa, la niña seguía gritando por días, semanas y meses. Se balanceaba incesantemente y se golpeó la cabeza - típica de los niños que han pasado largos períodos sin afecto o estimulación y el acudir a esos comportamientos para calmarse.
El niño se despertó gritando de los terrores nocturnos. Se rascó hasta que sangraron, luego tomó las llagas abiertas por meses. Se mordía el interior de las mejillas y los labios y escupió sangre bits de carne, pero nunca le dio una señal de que le dolía.
"Yo tenía tres hijos", dijo Melissa. "Sabía que esto no estaba bien."
Pero su agencia le aseguró que los niños necesitan tiempo para adaptarse y sugirió que sus habilidades como madre carecía. Más tarde, dijo, los funcionarios culparon a sus hijos mayores para la enseñanza del niño y la niña adoptada mal comportamiento.
"Usted tiene un tiempo difícil admitir, 'me pasó todo este tiempo y dinero, y no está bien'", dijo. "Pensamos que el amor sería lo arregles".
En el otoño, la joven estaba más tranquilo cuando ella se acostumbró a su nueva familia y comenzó ocupacional, del habla y terapia física. El niño era aún peor.
En la escuela, los profesores notaron que no tenía capacidad de atención. Le arrancó los juguetes de otros niños y sacó el pelo.
Los viajes a la pediatra condujo a una sesión con un conductista, que le recetó Ritalin para la hiperactividad y de terrores Klonadine su noche. Los medicamentos no hizo mucho, sin embargo, para frenar su creciente aversión a otros en su familia.
El muchacho se resistió a unirse en el deporte o cualquier actividad que involucraban a grupos o compartir. Si Melissa reprendió al niño por mala conducta, se aseguraría de que estaba buscando y luego repetir lo que había hecho.
Si ella lo castigó aún más, respondió haciendo orinar en su silla o su asiento en el coche.
"Fue una cuestión de control", dijo. "Está hecho pis en cada vehículo que hemos propiedad."
Melissa y Gerry se enteró más tarde que tal comportamiento señalado trastorno negativista desafiante, común entre los niños una vez institucionalizada.
El niño se atragantó el gato o golpeado a sus hermanos y hermana. Era encantador y cariñoso con los maestros y las personas que apenas conocía, pero se niegan a abrazar a su madre o familiares.
Una vez, antes de un viaje en coche, Melissa oído gritar hija y la encontró sangrando en el suelo. El muchacho la había derribado, pisoteó la cara en el barro y se subió sobre ella en el vehículo, gritando con alegría:-Tengo en el primero. "
Terapeutas diagnosticado que el comportamiento como el trastorno reactivo de vinculación, otro síndrome en los niños institucionalizados que recibieron poca atención durante los períodos cruciales de su desarrollo. No son capaces de desarrollar lazos con los cuidadores o de lo que se refiere a las relaciones.
La familia intentó médico después de médico, de terapeuta a terapeuta.Durante un tiempo, el muchacho avanzó bajo el cuidado de un terapeuta en Shadyside, pero retrocedió cuando el terapeuta se mudó a otro estado. Otros doctores nunca habían oído hablar de este trastorno o que nunca habían tratado a un niño post-institucionalizado.
Melissa y el matrimonio de Gerry deshilachados, destacó por pasar horas Melissa con el niño en sesiones de terapia o en ejercicios de comportamiento, mientras que Gerry trabajado horas extras para pagar su tratamiento. Sus amigos se quedaron lejos.
Sus hijos crecieron otros deprimidos, resintiéndose la cantidad de tiempo dedicado a sus padres el muchacho y sus ataques contra ellos. Uno de sus hermanos se hizo tan aterrorizados por el muchacho que podía dormir sólo cuando se encuentra entre Melissa y Gerry en su cama.
las formas convencionales de la disciplina no tuvo ningún efecto sobre el muchacho, que había sido descuidado y maltratado antes de ser eliminado de los cuidados de su madre biológica y se coloca en el orfanato.
De vez en cuando, el muchacho se emiten un destello de cariño, lo suficiente para darles esperanza. Pensando en el momento raro, tranquilo cuando él le dijo: "Mami, no me refiero a ser malo. No puedo evitarlo", Melissa hace enterrar el rostro entre las manos y sollozaba.
"Yo le preguntaba:" ¿Por qué, Dios? ¿Soy una mala madre? Yo pensaba, 'Si tan sólo lo abrazó más, o lo amaba más, o [poner] más notas en su mochila.Que va a hacer tanto de una cura para su hijo. "
En dos ocasiones, Melissa y Gerry admitió que el muchacho el Western Psychiatric Institute y Clínica en Oakland. Cada vez que, dijo, los médicos a la conclusión de que el muchacho no era un peligro para sí mismo y lo descarga.
Se miraban a haberlo admitido en los programas de tratamiento residencial, pero su seguro médico no lo cubre y sus finanzas estaban exhaustos. Así eran sus nervios y su salud.
En un esfuerzo por recoger algunos bits de información útil que han perdido, Melissa y Gerry tenían sus registros de los niños adoptados médica traducido de nuevo en 1998 por un educador de la universidad, sin vínculos con la agencia de adopción. Los registros mostraron que tanto el niño y su hermana adoptiva fueron un año más joven que la agencia les había representado a ser.
Los expedientes también demostraron que cinco familias rusas ya habían tratado de adoptar al niño, pero lo devolvió al orfanato porque estaba muy perturbado psicológicamente.
Eso enfureció a Melissa, quien creía que la información había sido omitido intencionadamente de ella y su marido para que no se deciden en contra de la adopción del niño. Ella y Gerry demandó a su agencia, alegando que no había revelado la información.
El verano pasado, el muchacho atacado a otro niño mientras la familia asistieron a un juego de pelota de la comunidad. Ese incidente, seguido por la crueldad siguió a sus hermanos, le pide Melissa y Gerry en octubre a admitirlo por tercera vez al oeste de Psych.
Marido y mujer finalmente admitió lo que había tenido miedo de cada uno decir en voz alta: no podía correr el riesgo la seguridad de sus otros hijos por lo que el chico a casa. Melissa hizo la llamada telefónica para decirle a su condado de la Infancia y la agencia de Servicios de la Juventud, que ella y Gerry ya no podía cuidar de su hijo.
Su última visita en Western Psych era insoportable.
Se le dio al muchacho una foto de familia y las fotos de sus otros hijos le había hecho. Ellos sollozó mientras explicó que siempre lo amaría, pero carecían de los recursos o la capacidad para ayudarle a mejorar.
El niño juega con coches de juguete en el suelo y respondió con calma, "Aceptar". Nunca lloré.
Nunca lo volví a ver. Dos semanas más tarde, dejó el hospital para un hogar de acogida elegido con la ayuda de Niño Cada Inc., una agencia de Pittsburgh que trata de colocar a los niños con necesidades especiales o problemas.
"Todavía hay días en que esté con mucha rabia, con una enorme cantidad de culpabilidad. No creo que yo sería un ataque si la madre podría dar a este niño y no siento nada", dijo Melissa. "Pero tengo que creer que le dio la oportunidad de traerlo aquí.
"Me encantó este muchacho. Enseñé a este niño a decir la gracia, para limpiarse el culo. Con suerte, nos proporcionan una base [para su] nueva ubicación para construir."
Hoy en día, el niño está siendo adoptado por séptima vez, esta vez por la familia de acogida. Él es el único niño en ese hogar y, el progreso sin otros hermanos de intimidar o herido, que ha hecho con su comportamiento.
Melissa y Gerry están rindiendo sus derechos de paternidad al niño, pero tendrá que pagar manutención de los hijos hasta que sea adoptada o cumpla 18 años.
Han pasado más de 100.000 dólares en atención médica para el niño, además de más de $ 40.000 en honorarios y gastos de adopción. Pero retiró la demanda contra su agencia de adopción a principios de este año y dijo que ninguna cantidad de dinero que podría haber sido adjudicada compensar su terrible experiencia.
Con dificultad, se han ignorado los desaires y exclamaciones de horror de los vecinos y antiguos amigos que no pueden comprender la forma en que dio a su hijo. Esas personas no viven su vida, dijo Melissa, o llevar a su responsabilidad de sus otros cuatro hijos.
"Estábamos acostumbrados a vivir día a día, a veces hora por hora", dijo ella, juntando las manos. "Los otros niños se pierda él. Todavía está su hermano. [Pero] no se modifiquen los niños ahora. Ellos se ríen más, sus calificaciones están mejorando. No hay miedo ahora.
"Todavía tengo cinco hijos, pero uno solo no vive conmigo. En algún lugar, tengo un hijo que nunca voy a levantar, y yo lo amaré hasta que muera. Por lo menos sé que le salvó la vida. I siempre se puede decir eso ".
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Fracasos en la adopción:
